Bueno, ya se han ido nuestras
visitas. Uno más que otra, cargados de cachivaches y sin un duro en los bolsillos,
y nosotros retomamos nuestra normalidad en Nairobi. Esto me cuesta porque voy
retrasada en los días y se me van acumulando los recuerdos, pero sigo en el
empeño. Por lo menos así quedará lo importante, o al menos, lo que ha sido
importante para nosotros.
Antes de nada, aclarar y despejar
dudas. Me he enamorado de un bebé, pero nada más. Sólo he sentido una gran
ternura y mayor deseo de proteger el pequeño niño de Nairobi, sucio, descuidado
y enfermo bebé, pero ni hay posibilidad, ni intención, ni capacidad de que mi
enamoramiento llegué a más. Espero que haya quedado claro para todos
aquellos que preguntan ¿Qué bebé?
Y dicho esto, sigamos con
nuestras misceláneas de Nairobi. Contaba nuestras visitas a Mister Wafula, el
estupendo profesor de inglés e impresentable keniata que, por cierto, cada día
lo es más –hoy se le ha olvidado que teníamos clase y con la misma me he vuelto
a casa-. En fin, Mister Wafula alterna las clases de gramática y lectura con
historias propias. Cada vez que me tiene que explicar que significa algo me
pone un ejemplo sobre su vida para llegar al significado de la palabra. Es muy
entretenido y así he sabido cómo conoció a su mujer, cuál es su relación con su
suegro y quién es su hermana, entre otras tantas historias.
La vida de su hermana es
interesante. Los Wafulas pertenecen a la tribu de los Loyan. Su padre es militar
y su madre, que murió siendo ellos pequeños, fue maestra. El caso es que su
padre, un hombre religioso y convencido en que en la educación está el
porvenir, le puso a cada hijo el nombre de un personaje destacado de la
historia inglesa o americana. Así, Mister Wafula se llama Geoffrey, en memoria
de Geoffrey De Freitas, un embajador británico que apoyó la creación de una
Federación de África Oriental, que incluía a Uganda, Tanzania y Kenia. Todos sus hermanos, que son nueve, tienen
nombres de ilustres: Kennedy, Lincoln, Victoria…y Olimpia, su hermana especial.
De pequeña Anne Olimpia sufrió la
polio en un halo de misterio porque a todos les pareció una especie de mal del
diablo. El caso es que la enfermedad la dejó paralítica y también provocó que
en su villa todo el mundo la repudiase. Tal fue el desprecio y la desconfianza
de su gente que la familia entera tuvo que marcharse a la ciudad para proteger
la vida de la pequeña. El padre buscó la mejor educación para ella y
finalmente, tal y como él pronosticó, Anne Wafula Strike se convirtió en una olímpica
británica y en el primer corredor en silla de ruedas que representa a Kenia en
los Juegos Olímpicos. Ahora estoy leyéndome su libro, recomendado por Mister
Wafula, que se titula “In My Dreams I Dance”.
Pero hay más historias. Las que
vivimos en persona. No sé si ya comenté algo sobre la corrupción en Kenia.
Supongo que sí, porque el carácter corrupto de los policías keniatas es tan del
país que forma parte de su cultura, tanto o más como los matatus.
Pues bien, Julio ya ha podido
comprobar en persona las mañas del cuerpo de seguridad. Un domingo, Julio salió
tempranito de casa porque Raúl desde España le pidió que mandase dinero al
campamento, a Enkerende. A su vez, Julio le pidió a Francis que le acompañase
porque no conocía el sistema de envío de aquí que, por cierto es muy curioso: tú depositas en unos de las miles establecimientos que hay la cantidad de dinero que quieras, y a través del teléfono y desde cualquier parte
del mundo, el destinatario de otro número de teléfono puede ir a uno de esos establecimientos a recoger ese dinero. Se
trata de transferencias a través del teléfono.
Bueno, a lo que iba, pues Julio
saca el dinero, se encuentra con Francis, van a la oficina, pero no pueden
ingresar el dinero porque en ese momento y hasta las dos de la tarde no está
operativa. Pues, nada, pole pole y a esperar a la tarde, así que vuelta a casa.
El caso es que por el camino en coche, Fracis se mete por donde no debe, o no,
eso no importa y un policía le intenta parar. Ante el stop, Francis sabiendo lo
que le venía encima y con un tráfico de tomo y lomo intenta huir…sin éxito.
Adivinan dónde terminaron los dos amigos: En comisaría. Les acusaron de
saltarse un stop, y es curioso porque en Nairobi no hay stops; acusaron a
Francis de criminal y después de ser un traficante de armas; preguntaron a
Julio si le pagaba por llevarle, a lo que Julio respondió con rotundidad que es
su amigo…, y así hasta que llegó el momento de o a juicio o soborno: 10000 Ksh –unos
cien euros-. Julio terminó regateando el soborno y consiguió disminuir la cuota
a 5000 Ksh. Así, sin cumplir con el cometido, con 50 euros menos en el bolsillo,
una indignación de tres pares de narices (la de Julio, porque Francis sonreía)
volvieron a casa. Y es que dicen que ir a juicio hubiese sido un mal peor, ya
que la corrupción fluye de arriba abajo.
Lo mejor de la historia es que todos se
pegaron por pagar los 5000 Ksh. O y Francis al día siguiente vinieron con el
dinero, y Raúl y Cris, hicieron una transferencia a Julio. En fin, que Julio está esperando a que todos
estemos juntos para gastar los 5000 Ksh en una buena cena entre amigos.
Por cierto, al final hizo la
transferencia sin más complicaciones.
Bueno, chicos, sigo con las
historias pendientes. Prometo que la próxima tratará sobre Marlene, Xochitl y
Kibera.
Hoy llevo 82 días en Kenia.
Julio, 88. Ya hemos ampliado el visado para poder permanecer más tiempo en el
país, y por cierto eso también es una buena historia.
Hoy Nasibu ha comido con nosotros
y nos ha enseñado nuevas palabras en suajili: Weee (ehhh tú), ni ni (no te pases), chunga (ten cuidado).
Seguramente Julio se va a
encontrar en un aprieto para colocar fotos en este post, porque no pretenderán
que se ponga a sacar flash en una comisaría. ¿Verdad? De Mister Wafula y su secretaria,
Janet- que recuerdo el nombre gracias a Alberto porque me dio la pista de la
hermana de Michael Jackson- ya me
buscaré una excusa para sacarles alguna foto.
Besos, abrazos y sonrisas a todos….
Pd: A ya estás tardando en venir, te esperaba ya….
Que fuerte Julio!, si es que eres un morrudo, mira que en comisaria, jajajaja!. Pero en fin, estaba claro que con tu labia ibas a regatear y lo que me extraña es que no regatearas más aún. La Rebe me esta diciendo que con la suerte que tienes estaba claro que todo te iba a salir bien. Besos a los dos de parte de Kiko y Rebe.
ResponderEliminarSí, ya es la segunda vez que nos sobornan. La policía aquí abusa de poder y autoridad, lo que implica que nadie quiera tratar con ellos. Los keniatas lo saben, no se cortan un duro en decirlo y nadie se fía de ellos. Lo mejor que uno puede hacer es evitar juicio, pues te pueden acusar como lo hicieron con Francis, de tener armas en casa. Son capaces de todo, de inventarse lo que haga falta con tal de salir inmunes.
ResponderEliminarY Kiko, tienes razón, podía haber regateado más todavía, pero tuve que ser prudente por el hecho de desconocer hasta donde son capaces. Lo que te cuenta la gente no es nada agradable.
Corrección: Nuria me ha escrito. Comparte profesor con nosotros y me indica que me he equivocado: Mister Wafula no se llama Geoffrey -ése es otro hermano- se llama Goddard, en honor a un juez británico al que admiraba el padre de Mister Wafula.
ResponderEliminarKiko y Rebe: besos enormes a los dos. Un día podríamos vernos por Skype? para verles esas caritas lindas
Pero hombre Juliooooooooooo, que ya no eres un chaval para ir escapando de la policía jejejejejejeejejejeje si es que.........
ResponderEliminarMe has alegrado el lunes con tu historia. Yo me imagino llorando del cague en comisaría y Julio regateando... En fin.Me encantan las historias de Míster Wafula y su tribu de hermanos con nombres ilustres. Bssss. Leila
ResponderEliminarHola niña!!Vais a volver a España en la onda, ya sabes por lo de la prevaricación y los sobornos!! Ja jaja, I miss youuuuuuuuuuuuuuu!! besito, eva
ResponderEliminaraiixxx yo también quiero estar ahí YA! de hecho esas eran las fechas que tocaban...bueno, las segundas o terceras.. porque se han cambiado tantas veces! pero ya en nada estoy ahí! y con muchísimas ganas!
ResponderEliminarbesitos
A
A.... Te tenemos la camita preparada. Por lo menos ya tienes fecha. Que ya te haces de rogar eh!
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